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| Arbelaitz |
Vivir es aprender a tener paciencia, a no recibir pasivamente gratificaciones inmediatas. Vivir es prestar una atención lenta y cuidadosa a los signos múltiples y con frecuencia ambiguos que la realidad nos ofrece, entre ellos los más decisivos para nuestro crecimiento y nuestra supervivencia como primates altamente sociales, los signos que emiten los demás.
Y no solo sus voces en un teléfono móvil, ni sus palabras o sus exclamaciones escritas en un mensaje electrónico: la variedad casi infinita de matices que caben en la mirada, en la actitud, en la plena presencia. Antonio Muñoz Molina
El humor es tomárselo con filosofía. A.Espinosa
zocaencolodra.wordpress.com
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